Pequeños rituales para Navidad y Año Nuevo
Supersticiones para unos, rituales para otros…
Arrojar un puñado de arroz, tirar hacia arriba 13 monedas de 5 centavos que antes se les llamaba medios.
Champán: bañarse con champán o tomar una copa con un anillo o algo de oro dentro de la copa y si eres casado o tienes pareja colocar tu anillo en la copa de la pareja para garantizar la estabilidad de la relación un año más.
Dinero: coger billetes de diferentes denominaciones y países en las manos pidiendo prosperidad económica.
Encender velas de colores: las azules traen la paz; las amarillas, abundancia; las rojas, pasión; las verdes, salud; las blancas, claridad, y las naranjas, inteligencia.
Lavarse las manos con champaña y azúcar: para tener dinero. A las 12 de la noche, se meten las manos a una fuente con azúcar. Luego se lavan con champaña.
Lentejas: comer un poco de lentejas para asegurar la abundancia en las mesas en el nuevo año. Es una tradición que viene de Italia. Ya los romanos creían en la buena suerte de las lentejas. Por año nuevo regalaban un pequeño bolsito con lentejas y decían: “Que cada lenteja se conoverte en una moneda de oro”
Maletas: para asegurarte que vas a viajar salir con una maleta a la calle y dar toda la vuelta a la manzana de tu casa.
Quemar al muñeco “viejo”: para desprenderse de las cosas malas del año que termina. Es necesario hacer un muñeco con la ropa vieja. Si se quiere, se le puede poner en el bolsillo una lista con todas las cosas malas del año que quieren eliminarse. Se debe poner en un lugar sin riesgos de incendio. A medianoche se le prende fuego.
Repartir espigas de trigo: símbolo de la abundancia. Lo ideal
es repartirlas entre todos los asistentes (que todos tengan en las
manos la medianoche) y también esparcirlas por la casa.
Romero: sahumar a las doce la casa con romero mientras se barre hacia afuera.
Ropa interior: en Perú se dice que hay que usar un prenda de
color amarillo para tener prosperidad y felicidad; en otros países es
roja, para encontrar el amor y en algunos debe ponerse la prenda al
revés y después de la media noche cambiarla al derecho, para llegar a
tener mucha ropa nueva.
Sentarse y pararse con cada una de las doce campanadas para asegurarse que el nuevo año traerá boda.
Uvas: comer al dar las doce, la misma cantidad
de uvas, de una en una por cada mes del año que empieza; otros las ponen
debajo de la mesa y no se las comen.